¡mi padre un hacker!

He estado leyendo un libro (razones profesionales) sobre convertirse en  un "padre hacker" y poder tener controlado muy de cerca a nuestros peques en los ordenadores.  Tiene muchas técnicas sugerentes y detalladas de espionaje informático para un padre de hoy en día, yo leia y leia  y no podía creer lo que leia,  configuración de Bios, restricciones de programas, horarios, candados virtuales, cámaras de vigilancia de espionaje, control de acceso remoto y silencioso, controles de restricción desde los mismos routers, bloqueos de Ip, capturadores de teclado, congeladores de disco duro, unidades de llave de bloqueo,  sniffer, programas de control parental, filtros, incluso para el control del teléfono móvil, tarjetas USB de espionaje, inhibidores de frecuencia y pare de contar.  Por cierto he hecho un resumen detallado del libro en 4 páginas, con las respectivas direcciones de los distintos programas y aplicaciones que ofrecen y las ventajas y desventajas técnicas de las mismas, es decir, en que podrían fallar;  si  lo necesitas, solo tienes que escribirme.

Lo curioso del caso es que hay muchos padres dispuestos a adquirir y/o aprender estas técnicas y habilidades, con todo y lo que esto implica en tiempo, esfuerzo y dinero, con tal  de mantener a raya a su hij@, y que no se meta en lios. Ahora bien,  yo me pregunto hasta que punto será esto de beneficioso para la relación padre e hijo?

Si ya  no tenemos bastante,  invirtiendo en tiempo, esfuerzo y dinero para adquirir los equipos electrónicos, para que  además, tengamos que sumar  una partida adicional para el respectivo control del mismo.

Todo esto sin contar con los pocos o casi nulos conocimientos de informática  y tecnología en general, que tenemos los padres hoy en día,  que dicho sea de paso,  es una brecha que cada vez va a mayor.  Ahora a lo que voy,  no sería mas provechoso para ambas partes, intentar al menos primero, sembrar en ellos sólidos valores cristianos y humanos que les ayude a ser mejores personas para el bien de todos.  Valores que les entusiasme hacer las cosas bien, no por mera satisfacción personal, sino por el servicio que prestan, que aprendan a trabajar con objetivos ya claros, con metas definidas y así no perder el tiempo navegando sin norte claro, valores que les enseñen a valorar su tiempo como un tesoro prestado de Dios que luego tenemos que devolver a El tarde o temprano y que tendremos que dar cuenta en que lo hemos invertido, valores que nos enseñen a mirar lo bueno de la vida, lo especial, lo positivo, lo esperanzador, lo constructivo, lo edificante,  de tal manera que te envuelva y te consuma el tiempo y no deje paso a perderlo en tonterías que hacen daño. ¿Porqué no invertimos ese tiempo, esfuerzo y dinero (que de seguro será menos), en construir y consolidar relaciones padre e hijos basadas en la confianza, el respeto, la verdad, la comunicación efectiva, la tolerancia, la comprensión, el amor, etc.

Nosotros los padres tenemos que aprender ordenadores, pero no para espiarlos sino para estar mas cerca de ellos, para afianzar mas nuestras relaciones, para compartir mas tiempo con ellos y su amigos y en cyber-actividades que a ellos les atraen, para conocerles mas y mejor,  para  poderles ayudar oportunamente, para engancharnos a sus gustos y nos vean parte de ellos y no como mero dinosaurios retrógrados.

y tú ... ¿qué estas pensando?
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Un abrazo,